Fin de Semana 6
JUEVES
Jugué al pool con Mr. Freud, Valentía y otro chabon. Luego fuimos a tomar cervezas y valentía como que ya estaba alegre, la lleve a su casa y creo haber tenido oportunidad de probar sus labios, lo triste es que no lo hice. Termine diciéndole que al otro día iba a retirar un peli de su casa.
VIERNES
Supuestamente iba a jugar al futbol (la epidemia mundialista vio) y me tenia que encontrar en la facultad. Bueno me dije, voy con ropa sucia y al carajo si voy a jugar a la pelota. Me mandé y oh sorpresa, estos hijos de la pecaminosa que les dio el ser (influencia Quineana, por Quino digo) no iban a jugar porque no había pelota, no había equipo contrario y no había ni siquiera ganas. Entonces la llame a Valentía y le dije que iba a su casa y de ahí la invite a tomar una gaseosa, el problema es que “me tilde” hablando vanalidades y se me fue el tiempo, ella tenía que hacer otras cosas así que no quedamos en nada, de allí me fui a jugar al pool y tenía tal grado de bronca conmigo mismo que gane, cosa que no hago nunca.
SABADO
Partido de Argentina, quedamos con los muchachos del barrio en un poderoso asado para ver luego el partido. Ah! Que lindo sentirse una persona común por un momento aunque sea, hablar vulgaridades, hacerse el autosuficiente, inventar mujeres y agrandar mi pene a tamaños astronómicos! Que lindo volver compartir con esta gente con la que compartí toda mi niñez y adolescencia. Eso si no lo hago muy seguido porque no puedo estar mucho tiempo sin decir algo que los deja a todos callados y se hacen los boludos y siguen hablando de cosas que yo no hago o no comprendo. Pero esta vez fue lindo, me sentí bien alentando a once chabones en el otro lado del atlántico para obligarlos a hacerme sentir mejor.
Luego del asado me fui a buscar a los muchachos de la Fac., y allí estaban (no me pregunten donde porque ya lo saben) y también estaba Valentía que había visto el partido con ellos. Estaba linda la guacha, fresca y hermosa como una madrugada.
Hubo un momento donde se apoyó en la mesa del pool justo cuando yo estaba detrás, sentado a unos pasos. No les puedo explicar el hecho de que todavía no me puedo sacar esa imagen de la cabeza, hay ciertos momentos en que uno agradece ser hombre, este es uno de esos momentos.
Ella después se fue a una fiesta con unas amigas y yo me quede lamentando mis batallas perdidas de antemano. A las 1 y 30 ya estaba en mi casa, tapadito y pensando en la madrugada y sus caderas.
DOMINGO
Pensé el porque no se daba lo de Valentía, y llegué a la verdad. Lo que yo estaba haciendo es idealizarla a la minita, y desde que tengo memoria, a toda mina que idealizo nunca pasa nada, se transforma en amistad y ahí cagó, ahí se queda. En cambio todas las mujeres a las que primero me atrajeron físicamente con esas si pasaron cosas en mayor o menor medida. El plano es así:
Idealización – Respeto – Amistad – Metamorfosis de la minita en cuestión a la de un ser asexuado
No Idealización – Nada de respeto, solo seguir normas urbanas – Ratonearme con la muchacha en cuestión – Rogar a dios para descansar en su piel.
Entonces me dije, yo quiero historia con la minita esta, menos respeto y más acción entonces. Le mande un mensaje para invitarla a salir a la noche pero me mando algunas excusas muy buenas y de una buena manera que no me quedo más que contemplar una nueva amistad. Carajo. Soy un anacrónico por excelencia, siempre a destiempo.
Jugué al pool con Mr. Freud, Valentía y otro chabon. Luego fuimos a tomar cervezas y valentía como que ya estaba alegre, la lleve a su casa y creo haber tenido oportunidad de probar sus labios, lo triste es que no lo hice. Termine diciéndole que al otro día iba a retirar un peli de su casa.
VIERNES
Supuestamente iba a jugar al futbol (la epidemia mundialista vio) y me tenia que encontrar en la facultad. Bueno me dije, voy con ropa sucia y al carajo si voy a jugar a la pelota. Me mandé y oh sorpresa, estos hijos de la pecaminosa que les dio el ser (influencia Quineana, por Quino digo) no iban a jugar porque no había pelota, no había equipo contrario y no había ni siquiera ganas. Entonces la llame a Valentía y le dije que iba a su casa y de ahí la invite a tomar una gaseosa, el problema es que “me tilde” hablando vanalidades y se me fue el tiempo, ella tenía que hacer otras cosas así que no quedamos en nada, de allí me fui a jugar al pool y tenía tal grado de bronca conmigo mismo que gane, cosa que no hago nunca.
SABADO
Partido de Argentina, quedamos con los muchachos del barrio en un poderoso asado para ver luego el partido. Ah! Que lindo sentirse una persona común por un momento aunque sea, hablar vulgaridades, hacerse el autosuficiente, inventar mujeres y agrandar mi pene a tamaños astronómicos! Que lindo volver compartir con esta gente con la que compartí toda mi niñez y adolescencia. Eso si no lo hago muy seguido porque no puedo estar mucho tiempo sin decir algo que los deja a todos callados y se hacen los boludos y siguen hablando de cosas que yo no hago o no comprendo. Pero esta vez fue lindo, me sentí bien alentando a once chabones en el otro lado del atlántico para obligarlos a hacerme sentir mejor.
Luego del asado me fui a buscar a los muchachos de la Fac., y allí estaban (no me pregunten donde porque ya lo saben) y también estaba Valentía que había visto el partido con ellos. Estaba linda la guacha, fresca y hermosa como una madrugada.
Hubo un momento donde se apoyó en la mesa del pool justo cuando yo estaba detrás, sentado a unos pasos. No les puedo explicar el hecho de que todavía no me puedo sacar esa imagen de la cabeza, hay ciertos momentos en que uno agradece ser hombre, este es uno de esos momentos.
Ella después se fue a una fiesta con unas amigas y yo me quede lamentando mis batallas perdidas de antemano. A las 1 y 30 ya estaba en mi casa, tapadito y pensando en la madrugada y sus caderas.
DOMINGO
Pensé el porque no se daba lo de Valentía, y llegué a la verdad. Lo que yo estaba haciendo es idealizarla a la minita, y desde que tengo memoria, a toda mina que idealizo nunca pasa nada, se transforma en amistad y ahí cagó, ahí se queda. En cambio todas las mujeres a las que primero me atrajeron físicamente con esas si pasaron cosas en mayor o menor medida. El plano es así:
Idealización – Respeto – Amistad – Metamorfosis de la minita en cuestión a la de un ser asexuado
No Idealización – Nada de respeto, solo seguir normas urbanas – Ratonearme con la muchacha en cuestión – Rogar a dios para descansar en su piel.
Entonces me dije, yo quiero historia con la minita esta, menos respeto y más acción entonces. Le mande un mensaje para invitarla a salir a la noche pero me mando algunas excusas muy buenas y de una buena manera que no me quedo más que contemplar una nueva amistad. Carajo. Soy un anacrónico por excelencia, siempre a destiempo.
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